ANTECEDENTES DE LA ESCUELA SUPERIOR DE ARTE DRAMÁTICO DE VALENCIA

Durante todo el período de la segunda mitad del siglo XIX, se desarrolla en Valencia un creciente interés en la sociedad por el arte musical. Tal es así que proliferan las escuelas musicales: el Liceo Valenciano, la Academia Filarmónica, la Escuela de Canto de la Sociedad Económica de Amigos del País, la Sociedad Instituto Musical, etc. A instancias de estas dos últimas instituciones fue posible la creación del Conservatorio de Música,  cuyo Reglamento fundacional está fechado en febrero de 1879.

Es en 1910, al hacerse cargo de la dirección Ramón Martínez y Carrasco, cuando comienza a reivindicarse la oficialidad del Conservatorio de Valencia. En el Acta del Claustro de Profesores del Conservatorio de Música, de fecha 25 de septiembre de 1910, viene reflejada la convocatoria de una Junta de profesores para proceder a la confección del programa y para establecer las condiciones para optar a la plaza de las asignaturas de nueva creación. Entre ellas, la de Declamación, que comienza a impartirse en el curso 1911-1912, a cargo del profesor Juan Colom. En otra acta, la de 20 de mayo de 1911, se cita expresamente el libro de texto a utilizar para la asignatura de declamación: La guía artística, de Rodríguez Solís. Finalmente, el 26 de abril de 1911 y mediante una Real Orden, se reconoce el carácter oficial del Conservatorio de Música Valencia.

La normalización de los estudios de Declamación se dio el curso siguiente (1911/12), en el que decidió estructurarse la materia en cinco cursos:

1º- Lecciones del libro de Rodríguez Solís.

2º- Lo mismo más lecciones prácticas de Declamación.

3º- Comedia.

4º- Drama.

5º- Tragedia.

El Reglamento interno del Conservatorio, en su capítulo 4º cita: “Del Orden de los estudios”, artículo 28, establecía lo siguiente: “Los estudios se dividen en cuatro grupos: Composición, Cantantes, Instrumentistas y Actores”.

El 16 de noviembre de 1917, el Conservatorio deja de depender de la Diputación y del Ayuntamiento, y se incorpora al Estado, pasando a denominarse Conservatorio de Música y Declamación de Valencia. En esta época (entre 1918 y 1929) se hace cargo de la asignatura de Declamación el profesor / actor Francisco Palanca, que poseía experiencia en las tablas. Fue actor “profesional”, actuando en diversas compañías, incluida la de María Guerrero de Madrid.

En 1929, se hace cargo de la parte de Declamación Francisco Comes (también actor), el cual llegó a ser Director del Conservatorio (el primero de la Sección de Declamación) entre 1939 y 1943. Durante la Guerra Civil se suspenden las clases, retomándose poco antes de concluir ésta, en el curso 1938-1939, a cargo de las cuales continúa Francisco Comes.

Una nueva regulación de los estudios de Declamación se produce mediante el Real Decreto de 15 de junio de 1942. Las asignaturas que recoge este Decreto para la sección de Declamación son: Dicción y Lectura expresiva, Declamación práctica, Indumentaria y caracterización, Historia de la Literatura dramática y Arte Dramático. Diez años más tarde, el Decreto de 11 de marzo de 1952 (Ministerio Educación Nacional B.O.E del 1 de abril), en su artículo 1 publica la separación de  las enseñanzas: “Las enseñanzas de Música y Declamación, que actualmente figuran unidas en los Conservatorios, quedan separadas a partir de la publicación de este Decreto, reservándose las de Música para los Conservatorios y las de las Secciones de Declamación de los mismos para las Escuelas de Arte Dramático”.

En Valencia, Arte Dramático, seguirá siendo una Sección del Conservatorio hasta principios de la década de los 80. En 1978 se realiza una renovación que alcanzará a todos los niveles, desembocando en el Plan Experimental de Arte Dramático de 1978, implantado en el curso 1978-1979, verdadero germen de la actual ESADV. Este Plan Experimental, pronto será refrendado y aprobado (enero de 1979)  por la totalidad del claustro. Ahora el término “Arte Dramático” encierra toda una declaración de intenciones: se sustituye Declamación por Interpretación; aparecen la Técnica Corporal y la Técnica Vocal como instrumentos básicos para el “entrenamiento” del actor, y se aumenta la parte teórica, donde cobra especial importancia la aparición de la asignatura de Dramaturgia.